viernes, 12 de mayo de 2023

LA UNICA MUJER PRÓCER DE LA INDEPENDENCIA PARAGUAYA

 

Siguiendo con el hilo conductor de la Independencia Paraguaya, hoy recordamos, a la única mujer Prócer de la Gesta liberadora, que tuviera lugar en los días que próximamente conmemoraremos.

Se trata de Doña Juana María de Lara y Villanueva de Díaz de Bedoya, cuya intervención fue una de las principales y que con justicia fuera reconocida por el Decreto Ley Nº 4082/10 que la declara Prócer de la Independencia Nacional.

Ella, había nacido en Asunción en el año 1760, como fruto de la unión de Don Carlos José de Lara, un comerciante español oriundo de Cádiz, y de Doña Luisa de Villanueva y Otazú. A la edad de 27 años, se casó con el capitán español José Díaz de Bedoya, con quien no tuvo hijos. Sin embargo, se constituyó de madre de sus hijastros: Ventura, José, Joaquín, Francisco y Manuela al encargarse de la crianza y educación de ellos.

Tras quedar viuda en el año 1806, Doña Juana María consagró su tiempo y sus bienes a las obras de caridad desempeñándose como Mayordoma Perpetuo de la Cofradía del Santísimo Sacramento. Así mismo, fue integrante de la tercera orden Franciscana, al mismo tiempo de ser depositaria de las alhajas y ornamentos de los altares dispuestos en la Plaza de la Catedral y en las celebraciones del Corpus Christi.

Siendo Mayordoma de la Catedral, sus idas y venidas a la Cofradía, la convirtieron en una agente entre los que serían luego con ella, los Próceres de la Independencia. Esos movimientos no habían sido razón de sospecha teniendo en cuenta su carácter, al mismo tiempo de que se trataba de la ciudad de un importante y afamado regidor español del Cabildo de Asunción.

Su función cobró fundamental relevancia en el plan teniendo en cuenta la proximidad de la casa de Doña Juana María con la de los hermanos Pedro Pablo y Sebastián Martínez Sáenz (Actual Casa de la Independencia), donde también vivían sus sobrinos Vicente Ignacio y Juan Manuel Iturbe, situación esta que le permitió estar al tanto de las conspiraciones libertarias.

Su labor facilitó el contacto de los conjurados con los oficiales de guardia del Cuartel de Rivera y de la Maestranza de Artillería, para el cumplimiento del plan de acción y la fijación de la hora en el que sería puesto en práctica. Igualmente, encargada de informar a los conspiradores del santo y seña “Independencia o Muerte”.

En el día pactado, acudió como de costumbre a la Iglesia de la Catedral y se arrodilló cerca de la pila de agua bendita, para avisar a los patriotas de los procedimientos a seguir, según instrucciones emitidas por Pedro Juan Caballero. Como en ese tiempo era habitual la asistencia diaria de los hombres a la Santa Misa, a medida que iban llegando los conjurados, esta les comunicaba el plan y el santo y seña.

También se encargó de recorrer las casas de los patriotas para transmitirles impresiones y noticias del momento. De este modo, ella fue en aquella fecha, quien propició la fluidez de la comunicación entre los patriotas, ejerciendo un rol fundamental para el éxito de la gesta patriótica. Doña Juana María, falleció el 10 de mayo de 1825, y sus restos fueron depositados en la Iglesia de la Catedral.


FUENTES: “Juana María De Lara: Prócer De La Independencia Paraguaya” Mtr. Yobana Insua Rojas/Artículo y resumen: Abg. Francisco Esquivel Santander, Asociación Cultural Manduara.
IMAGEN: Representación gráfica de Doña Juana María de Lara. Imagen de dominio público

No hay comentarios:

Publicar un comentario